¡Hola mis seguidores, lectores habituales y nuevos lectores! Caía cada mañana, del grifo, la gota que indicaba que necesitaba un arreglo. Nada impedía que la gota siguiera cayendo. Al fin y al cabo, ninguna de las dos había querido arreglar el artilugio de ninguna de las maneras, y aquella noche tras varios intentos por cerrarSigue leyendo «Relato: La Gorrona»