¡Bienvenid@s a los nuevos y a los ya habituales, seguid así, me hacéis feliz!
Les comparto este relato que no sé si reflexivo pero lo dejo por aquí por si acaso a alguien le gusta.
DESPROPÓSITO
La paciencia de Sara comienza a mermar y las ideas ya han rozado lo poco elocuente por lo que se decide a dejar que se sucedan las cosas naturalmente porque …
Ella le tendió la mano a sabiendas que no sabría si en su día la escogería. Los consejos hasta altas horas de la noche, las salidas a tomar café juntas en un grupo en el que apenas las integrantes se conocían rozaba lo pretensioso en ella porque … ¡Qué despropósito fue aquello! ayudar a un grupo de desconocidas alegando que podían ser lo que quisieran. Y que tenían que ser felices…
¿Había algo malo en todo aquello?
Laura con su jovialidad y sus ganas de aprender, animaba el cotarro. El caso era que cuando le tocaba pensar en ella, no hacia más que poner pegas. Prefería arrimarse a aquellas personas que, cómo ella, irradiaban alegría, pero lo cierto era que esas personas, siempre deducían que lo que ella estaba, era triste. ¿Cómo podía ser aquello?
Nadie sabía de los logros de Laura para con la vida, pero todos le tendían una mano, aseguraban que «Tenía que ser feliz»
Sara, que tantos buenos consejos le otorgaba… Espera, ¿Le estaba haciendo un favor? ¿Realmente necesitaban ayuda aquellas personas?
No se sabía si en aquel grupo lo que se necesitaba era la famosa felicidad o el grito desahogado de un grupo de mujeres hablando de sus cosas.
A veces, seguimos a aquellos que no nos hacen caso. y el que nos hace caso, pasa por lo mismo que nosotros, le ignoramos. ¿Crees que Laura aun habiendo logrado todo lo que en su vida se proponía, debería contar todos sus logros? ¿Crees que Sara debería dejar de suponer que todos necesitan ayuda?
Desde mi pequeñito prisma, alguien dijo que «Todos libramos una batalla» Y además, nunca sabes si lo que tu ves en otra persona es así. Por lo tanto … ¿Deberíamos presuponer?
…Cuando somos pequeños, jugamos porque nos apetece con el niño de al lado, nos juntamos sin preguntar sin llegar a conclusiones, ni suposiciones, creo que antes de juzgar ….
GRACIAS POR LEER…
HISTORIAS CON «K»
…Cuando somos pequeños, jugamos porque nos apetece con el niño de al lado, nos juntamos sin preguntar sin llegar a conclusiones, ni suposiciones, creo que antes de juzgar …
Exactamente Keren, en los niños no hay prejuicios hasta que le son inculcados.
Me gustó leerte una vez más. Saludos!!
Me gustaLe gusta a 3 personas
Eso es. Llegamos a la adolescencia con creencias que nos son dadas y que llegados a la adultez, tal vez, nos cuestionemos cuanta importancia Le hemos dado a esa creencia inculcada. Pero cómo todo, es rectificable.
Gracias por tu visita
Me gustaLe gusta a 1 persona